La película que vi el domingo se titula Un juego de inteligencia y es una coproducción alemana y austriaca del año 2007, de 130 minutos de duración y con director y actores desconocidos, por lo menos para mi.
Rainer es un exitoso productor de televisión que lo tiene todo y totalmente poseído por la coca. Ha llegado a la cima creando programas de televisión, cada cual más estúpido y vulgar, de los que aquí llamamos telebasura.
Un día, Pegah, una misteriosa joven, para saldar viejas deudas, colisiona intencionadamente con su coche a toda velocidad. Tras estar al borde de la muerte, Rainer se replantea su vida y decide producir un noticiario para el prime-time de su cadena, con noticias que que hagan pensar al espectador.
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